Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Capítulo 182

Linda solt6 una risa fria.

—Ya que sabes qué lugar es este, ni se te ocurra escapar, porque terminaras como yo, sirviendo a hombres todos los dias, deseando estar muerta. —

El corazon de Evrie se hundid.

Ella sabia perfectamente qué lugar era ese. Si Leandro la habia metido ahi, nunca habia pensado en dejarla salir.

En ese momento, se oy6 un alboroto en el pasillo, y varios guardaespaldas entraron de repente, armados hasta los dientes. Al frente venia Zeus.

Al verlos, Linda parecio recibir un golpe de panico y se encogié en un rincon. Zeus estaba fumandose un cigarrillo, su mirada se posd en Evrie y luego sonrié con los ojos entrecerrados.

—Evi, no eres nada obediente. Te dije que te quedaras en la habitacion, zy tu subes aqui? gAcaso quieres trabajar como ellas, en este negocio de servir a los demas hombres? —Content protected by Nôv/el(D)rama.Org.

Evrie lo miré fijamente. —TU y Reyes estan en la misma banda. —

Deberia haberlo sospechado antes, cuando en el estacionamiento subterraneo, Zeus la habia hostigado, y luego hablo largo rato con Leandro Reyes.

Resulta que son parte del mismo grupo criminal.

Zeus solté una carcajada arrogante. —Tranquila, si te portas bien, seremos compafieros y te llevaré a hacer buena plata, ja ganar muchisimo! —

Evrie retrocedio instintivamente, su rechazo era evidente. —No quiero tu dinero, quiero irme. —

—Qué chiste, preguntales a las demas si quieren irse. Se han ido acaso? — Zeus despreciaba la idea. —jVengan! Llévensela de aqui, el tercer piso no es para ella. —

Los guardaespaldas inmediatamente se hicieron cargo de Evrie y la arrastraron hacia afuera.

Evrie sabia que resistirse era inutil, después de volver en si les dijo: —Déjenme, puedo ir por mi cuenta.copy right hot novel pub

Llevaba un distintivo que simbolizaba su estatus en el pecho, y los guardaespaldas realmente no le hicieron dafio, sino que la siguieron de cerca.

Evrie miré atras, hacia Linda.

Ya habia salido de su rincén y se arrodillaba ante Zeus con una mirada coqueta y vestiduras provocativas. —Jefe, he estado trabajando bien ultimamente, tU dijiste que me promoverias a lider de grupo, ,cuando sera? — Zeus le sostuvo la barbilla y le dio unas palmaditas en la cara, con aire de superioridad.

—No te apresures, hay tiempo, depende de como te comportes. —

—Entonces, gte atiendo primero, si? —

Linda levantd la mano hacia su cinturon y con destreza comenz6 a desabrocharlo.

Evrie no pudo soportarlo mas y se dio la vuelta para irse.

De vuelta en su habitacion, los guardaespaldas cerraron la puerta con llave, dejando a Evrie encerrada.

Ella sac su celular, alin estaba sin sefial.

Intento usar el teléfono fijo, pero se dio cuenta que solo podia marcar el numero de Leandro.

No podia llamar a ningUn otro numero.

Evrie marco el numero de Leandro sin pensarlo demasiado.

Pero después de una larga espera, no le contestaron. Llamo varias veces mas, todas sin respuesta.

Parecia que Leandro no tenia intencidn de contestar sus llamadas.

Evrie cerré los ojos, sintiéndose como un animal atrapado en una jaula.

Desde el piso de arriba llegaban los sonidos de hombres y mujeres en pleno acto, fuerte y claro.

La imagen de la chica que habia visto debajo de la alambrada le vino a la mente, se preguntaba como estaria ahora. Linda al menos sabia como complacer a los hombres de aqui, pero esa chica parecia estar al borde de la muerte. —jZeus, espera! —

Zeus se detuvo con desgano, colgando como un mufieco de trapo.

—<¢Qué pasa, vienes a buscar a tu hermano? —

Evrie apretd los labios y le dijo: —La chica de la alambrada de esta tarde, puedes sacarla de ahi? —

Zeus parecia exasperado.

—Vamos, ya estas aqui y todavia piensas en ser una santa, gsalvar a esta, salvar a aquella? gAcaso parezco alguien que hace caridad? —

Evrie ignoré su charla: —Ella esta muy mal, si esos hombres siguen maltratandola, morira. —

Zeus se burlaba de ella sin piedad.

Evrie se aferraba a la ventana, apretando los dientes. De algun lugar habia sacado una cuchilla de cortar papel, afilada como una navaja, y la presionaba contra su mufieca.

—No te estoy pidiendo permiso, jmejor traeme a esa muchacha ya, 0 si no... sino me cortaré las venas! —

El filo de la cuchilla era tal que, con apenas un poco de presioén, la piel ya habia cedido, dejando escapar una linea de sangre. — Me estas amenazando? —

Zeus estaba afuera, frunciendo el cefio con impaciencia.

jEsta mujer siempre tan problematica!

iY ahora se atreve a amenazar con desangrarse delante de él, como si se hubiera malacostumbrado!

Evrie sabia que el distintivo que llevaba era de gran valor.

Al menos Zeus no se atreveria a hacerle nada, y los demas aqui tampoco se atreverian a tocarla.

Todavia tenia algo con qué negociar.

Con ese pensamiento, endurecié su corazon y aumenté la presion sobre la cuchilla, dejando que la sangre fluyera, gota a gota, corriendo por su mufieca.

Zeus—...—

Sin palabras, observaba como la sangre de Evrie manchaba sus manos y soltd unas pocas palabras. —Eres increiblemente valiente. —

Ella tenia razén, en este momento él realmente no se atrevia a hacerle dafio a Evrie.

Si no fuera porque Leandro Reyes la protegjia, ya la habria forzado, pero ahora, no solo no habia conseguido nada, sino que se veia obligado a hacerle favores.