Capítulo 185
Capítulo 185: Castigándolos por Ella
Un grupo de jóvenes, empapados de pies a cabeza, se acercó a Alonso con la intención de
disculparse, pero Alonso los detuvo con un gesto.
-No hace falta, -dijo Alonso con una voz helada.
El grupo pensó que Alonso, por respeto a su tio Ethan, les estaba ahorrando la disculpa. Orgullosos de ello, estaban a punto de retirarse cuando Alonso habló de nuevo:
-La persona a la que deben disculparse no soy yo, sino ella.
Alonso ni siquiera les dirigió una mirada. All content is property © NôvelDrama.Org.
Su vista pasó por Ethan y finalmente se posó en Valentina.
-¿Ella? -Las chicas mostraron desdén en sus rostros.
Era solo la acompañante del señor Valenzuela, ¿cómo iba a merecer sus disculpas?
Ethan también miró a Valentina brevemente, sin intención de hablar.
Valentina, con una sonrisa fría en sus ojos, de repente encontró la mirada de Alonso.
-Hermano, tengo frio. Si no hay nada más, me retiraré.
Dicho esto, Valentina se giró y dio un paso para irse, pero Alonso rápidamente la siguió.
Al mismo tiempo, Michael se acercó a Valentina.
-Te acompaño…
-Yo te llevo.
Las dos ofertas llegaron casi al unisono, situándose uno a cada lado de Valentina. Los presentes, aún procesando el «hermano» que Valentina habia dicho, se sorprendieron al ver esta escena.
Hasta que los tres se alejaron, Siobhan fue la primera en reaccionar. Pero su preocupación no
era el término «hermano», sino otra cosa.
-Si Alonso se va así, ¿qué pasará con el proyecto de inversión?
-preguntó Siobhan en voz baja a Ethan, con una sombra de preocupación en su corazón.
Hoy, su objetivo era no solo unir a Elara y Alonso, sino también asegurar la inversión de la familia Valenzuela. Ethan frunció el ceño ligeramente, pero pronto se relajó.
-No te preocupes, aunque Alonso esté molesto, es un hombre de negocios. No dejará que un
asunto personal afecte algo tan importante.
A pesar de las palabras de Ethan, Siobhan no estaba tan segura.
Ethan anunció que la fiesta continuaria, y aquellos que hablan molestado a Valentina pensaron que su huida» era su victoria.
Estaban a punto de ir a buscar reconocimiento por parte de Elara, cuando Michael regresó.
-¡Todos ustedes, vengan aqui! -llamó Michael a aquel grupo.
A pesar de su expresión severa, el estatus de Michael como joven maestro de la familia Bennett
hizo que las chicas no se atrevieran a desobedecer.
Al acercarse a la orilla de la piscina, una de las chicas lo llamó dulcemente:
-Hermano Michael…
Pero antes de que pudiera terminar, Michael la miró friamente y sin piedad la empujó al agua.
-¡Ah! -gritó la chica en pánico, y sus amigos inmediatamente se indignaron.
-¡Michael, qué estás haciendo!
-Es cierto, señor Bennett, somos invitados aquí…
Michael no se preocupaba por si eran invitados o no. Habían molestado a su invitada, Valentina.
Si ella no se hubiera ido, él habría actuado delante de ella.
-¿Prefieren saltar ustedes o que los empuje?
Michael se preparaba para la acción, y los presentes empezaron a temer.
Atacar a Valentina era una cosa, pero enfrentarse a Michael era otra. Sabian que si no saltaban,
él no los dejaría en paz. Uno tras otro, empezaron a saltar a la piscina. Una vez en el agua, Michael les lanzó una última mirada fría.
-Se quedan aquí hasta que termine la fiesta. Cuando salgan, les sugiero que desaparezcan
rápidamente de mi vista.
Dicho esto, se alejó, dejando atrás a los que se quejaban en voz baja.
-Todo es culpa de esa Valentina, es muy astuta.
-Claro, ella lo hizo. Apenas conoció a Michael y ya lo tiene defendiéndola.
-Mejor que no me la encuentre de nuevo, le haré pagar.
+15 BONOS
Mientras tanto, en la fiesta, la partida de Alonso también disminuyó el interés de Elara.
Habla visto como Alonso defendia a Valentina y eso la dejó con un sabor amargo.
A su lado, Luna estaba furiosa. Pensaba que sus amigas podrian hacer frente a Valentina, pero no solo no lograron nada, sino que terminaron humilladas.
Y lo de Michael…
Luna miró a Elara, claramente disgustada en el sofá, y se mordió el labio con un gesto de autoreproche.
-Lo siento, Elara. Si no hubiera sido por lo que dije, ellas no habrían ido tras mi prima y no estariamos en esta situación.
Elara presionó sus labios, consolándola.
-¿Cómo podría ser tu culpa? Ellas lo hicieron por mi. Pero parece que Alonso realmente se preocupa por tu prima. La oi llamarlo «hermano»…
Luna también encontró extraño el término «hermano» que Valentina usó para Alonso. Para los que no lo sabian, parecian hermanos. Pero sabía que era solo una estratagema de Valentina para acercarse a él
Así que, fingiendo preocupación, tomó la mano de Elara.
-Elara, mi prima es muy astuta. Si ella puede llamar así al señor Valenzuela, tu relación con él podria estar en peligro…
Elara mordió su labio, decidida.
-Luna, ¿podrías ayudarme a organizar un encuentro con tu prima?
Luna se sorprendió.
-¿Para qué quieres verla? ¿Y si te hace daño?
-Solo organízalo. Haré que ella se aleje voluntariamente del señor Valenzuela -dijo Elara con
determinación.
Luna sabía que sin una razón válida, Valentina no aceptaría. Pero rápidamente pensó en un plan
y asintió con confianza.
-De acuerdo, ¡organizaré el encuentro!